el señor plomero

Así se conoce por estos lares a los fontaneros. Claro que fijándome como se dice en francés "plumbier" o e inglés "plumber" no me debería de sorprender. Aunque seguro que hay lugares por España en que también se les conoce así.

A lo que iba, el fin de semana comenzó a gotear agua en un codo de la tubería del patio interior de donde vivo. Comenzó goteando hasta que se acabo soltando el tubito al que iba conectado el codo, inundándose el patio. Valiéndome de la más poderosa tecnología que pude (un moledor de chocolate que tiene el palo cilíndrico) pude tapar la fuga hasta ayer lunes que vino el plomero a reparar la tubería.

El señor plomero era una persona normal y corriente. No hubiese escrito este post de no ser por la alta tecnología tecnología que utilizó para secar la tubería antes de soldarla. Tampoco lo habría comentado si la cara de Juan Carlos, mi amigo y vecino mexicano se hubiese mantenido sin asombro alguno.

Pues bien, el señor plomero, para secar la tubería utilizó nada más y nada menos que su boca para succionar el agua que quedaba en la tubería y así, de esta forma secarla y poder soldar el codo.

No estoy muy familiarizado con el mundo de la fontanería, ni los métodos ni medios para los arreglos caseros, pero es que me ha parecido digno de mención. Pobre hombre, como siga a este ritmo absorbiendo tuberías, en poco tiempo en vez de sangre tendrá una mezcla curiosa de cobre y latón.

La cosa es que la tubería funciona, pero me preocupa la salud del señor plomero. El coste de la broma, 12 Euros. En fin, que por allí no engañan bien engañados..

Señor plomero, cuídese.